Título: Catalina la Grande: el poder de la lujuria
Autor: Silvia
Miguens
Edición:
Nowtilus, 2006
Número de páginas:
253
ISBN:
978-849763339-0
Sinopsis…
1762, el zar Pedro III
muere en un complot y Catalina asume el cargo de emperatriz como sucesora de su
esposo convirtiéndose a los 33 años en Catalina de Rusia. Aunque organizado por
la guardia imperial y por la nobleza, la misma emperatriz secundó el golpe
contra su marido y aparentemente aceptó las condiciones de los conspiradores.
Sin embargo, desde el
primer momento manifestó los planteamientos que había de regir su política:
fortalecimiento del Estado a nivel interno, apoyo ilimitado a la nobleza y
acción exterior agresiva para lograr la hegemonía de Rusia en Europa oriental y
situarse en la comunidad internacional en un plano de superioridad,
circunstancia que prometía un regreso a los tiempos de Pedro el Grande, abuelo
de su malogrado esposo.
Pocas mujeres en el
devenir de la historia levantaron una polémica alrededor de su persona como Catalina
la Grande. Inteligente, culta, autoritaria, sagaz, apasionada, gran estratega y
envuelta en todo tipo de conspiraciones cortesanas, la zarina que gobernó Rusia
con mano de hierro es, sin duda, una de las grandes protagonistas del
convulsionado s.XVIII.
Sobre la autora…
Silvia Miguens nació en Buenos Aires, Argentina. Ha
participado en congresos internacionales de Género, Literatura e Historia y
dictó conferencias, talleres y seminarios en universidades de Argentina y
Colombia sobre un tema que le apasiona: el cruce y la concordancia entre la
historia y la ficción y la especial participación de la mujer en la historia.
Posee numerosas publicaciones y premios, destacando su
bestseller Catalina la Grande, el poder
de la lujuria.
Mi opinión…
Ya os he comentado en alguna ocasión que una de las lecturas
que más me gustan es aquella que habla sobre la vida de los miembros de la
realeza. No, no me centro en la biografía pura y dura. Me refiero a aquellas
obras que se adentran más en el aspecto íntimo de los personajes, aquellas que
nos ofrecen la cara no oficial de los protagonistas.
Catalina de Rusia, o Catalina
la Grande, es uno de esos personajes que me llaman la atención.
Básicamente, mi interés se centra en el aspecto personal ya que es bien sabido
por todos las innumerables historias, que aún sigo sin saber si son ciertas o
no, que corren sobre esta persona.
El libro que hoy os traigo se centra en este apartado
íntimo. Contada en primera persona, es la propia Catalina la que nos narra su
existencia. Nacida en 1729 en Pomerania, estado alemán, Sofía Federica Augusta (su verdadero nombre) era hija de Johanna Elisabeth Holstein –Gottorp y
de Federico II de Prusia. Como sus
progenitores eran unos adolescentes, tenían 15 y 16 años respectivamente, y no
interesaba un matrimonio entre ellos por motivos políticos, a Johanna la casan
con Cristian Augusto de Anhalt- Zerbst,
hombre que la triplica en edad y que sería el padre legal de la pequeña Sofía
Federica.
Aunque pudiera parecer lo contrario, el padre legal de la
pequeña siempre le mostró estima. No obstante, se refería a ella como “su
ángel”. No ocurre lo mismo con su madre, la cual detesta a la pequeña desde que
nació por lo que es de imaginar que la pequeña Sofía Federica creció casi sola,
con el único amor de su niñera, Babet,
y de su tío Jorge Luis, con quien se inicia sexualmente.
Sofía Federica nos cuenta el tormento que supuso sus
problemas de espalda que la obligó a llevar un doloroso corsé durante diez
años. También nos cuenta cómo conoció a su futuro marido, Pedro
Ulrico de Holstein (futuro Pedro III
de Rusia), un primo lejano suyo por el que lo único que siente es un
profundo rechazo.
La vida de Sofía Augusta cambiará cuando su tía política
(era viuda de un tío carnal suyo), la emperatriz Isabel de Rusia (hija de Pedro
el Grande) considera que sus sobrinos Pedro y Sofía, han de ser sus sucesores
(la emperatriz no ha tenido hijos) A partir de este momento la vida de Sofía
Federica va a cambiar por completo pues se ha de desplazar hasta la corte rusa
y a empezar una ardua tarea para convertirse en la sucesora de la emperatriz.
Desde este momento, la joven Sofía (que adoptará el nombre
de Catalina en honor a la madre de la emperatriz) se centrará no sólo en ser la
esposa del heredero, sino en conseguir el trono para sí misma. Porque si
Catalina se muestra una persona ambiciosa desde el principio, su esposo no
tiene el mínimo interés en gobernar y se nos muestra como un ser pusilánime.
Comienzan una serie de acontecimientos, de complots, de
engaños y de estratagemas para apartar a Pedro Ulrico del trono y dejar a
Catalina sola en él.
Todos sabemos que esto sucede y en uno de esos complots,
fallece Pedro Ulrico quedando Catalina como Emperatriz de Rusia.
Pero por lo que principalmente se conoce a esta emperatriz
es por su descocada vida personal. Se le atribuyen multitud de amantes e
incluso prácticas sexuales digamos poco convencionales (todos conocemos la famosa historia con su caballo o la enorme cantidad de amantes que tuvo). Y eso era lo que iba
buscando en esta novela. Sí, sé que Catalina de Rusia impulsó al país, lo
mejoró y se preocupó por sus súbditos. Actuó como una madre protectora del pueblo
ruso a la vez que regía sus destinos con mano dura.
Catalina se muestra como una persona valiente, segura, inteligente e ilustrada. No es de extrañar que supiese hacerse
con el control de la extensa Rusia y ser coronada emperatriz a temprana edad.
Pero… ¿qué hay de cierto en esa vida tan ajetreada? Pues no lo sé porque esperaba que la novela
me sacase algo a la luz pero no ha sido así. Sí, Catalina cambia de amante
conforme le conviene pero digamos que es casi normal…si se analiza su
matrimonio y los continuos complots que la rodean, no me extraña que optase por
llevarse a sus aliados a un lugar más placentero… Tampoco el número de amantes que aparecen en la novela me parecen tan escandaloso. También es cierto que la novela termina, más o menos, con la coronación de la emperatriz; no se extiende hasta su muerte.
Aunque esta segunda novela que leo de la autora me ha gustado
más en cuanto a la narración , más fluida y entretenida, he de decir que
esperaba un poco más de “carnaza”. Ya he dicho que buscaba acercarme más al
personaje humano que al político y ha sucedido al revés. Pero no me ha
disgustado pues lo que he leído me ha gustado y he conocido un poco más sobre
este personaje que ha pasado a la Historia envuelta en unas circunstancias muy escandalosas.
Para ir terminado, si os apetece conocer a Catalina de Rusia
esta novela os proporcionará la suficiente información sobre ella. Si buscáis
adentraros en la parte más oscura de la emperatriz, es poca la información que
se nos da.
- Agradezco profundamente a la editorial el envío de un ejemplar para leer y reseñar
- Imágenes tomadas de Google
No me desagrada. También a mi me gusta leer novelas basadas en la vida de personajes reales (no sus autobiografías) y Catalina La Grande creo que puede dar mucho juego en un libro.
ResponderEliminarMe lo anoto.
Besotes
Esta no la veo para mi, en el momento actual. Un beso ;)
ResponderEliminarMe encantan estos libros, hay determinados personajes que me llaman mucho la atención =)
ResponderEliminarLo apunto!
Besotes