Título: El cielo en un infierno cabe
Autor:
Cristina López Barrio
Género:
Histórico, Romántico
Número de páginas:
623
ISBN:
978-84-01-35426-7
Sinopsis…
El Santo Tribunal de
la Inquisición juzga a una bella y misteriosa mujer de la que se dice que puede
sanar y destruir con el roce de sus manos. Pero lo que comienza siendo un
proceso rutinario por hechicería acaba revelando una trágica historia de amor
repleta de intriga, pasión, muerte, orgullo y pecado.
Sobre la autora…
Cristina López Barrio estudió Derecho en la Universidad
Complutense de Madrid y se ha especializado en Propiedad Intelectual. Su
primera obra, El hombre que se mareaba con la rotación de la Tierra, ganó el
II Premio Villa de Pozuelo de Alarcón de Novela Juvenil, de la editorial Everest
(2009)
Con su primera novela para adultos, La casa de los amores imposibles,
se dio a conocer al gran público, cosechando gran éxito entre los lectores.
Asimismo obtuvo el premio a la escritora revelación que otorga el conocido blog
literario Llegir en cas d’incendi.
La casa de los amores imposibles se ha traducido a quince
lenguas y publicado en veinte países, entre ellos Estados Unidos, Italia,
Alemania, Brasil, Argentina, Suecia, Israel o Serbia.
Mi opinión…
Hoy os traigo la reseña de otro de esos libros que tengo por
casa desde hace ya demasiado tiempo y al que no le había dado la atención
suficiente. El libro del que hoy os hablo, El cielo en un infierno cabe, lo
gané hace mucho tiempo en un sorteo que se hizo en un blog (ya ni me acuerdo en
cual) y casualidades que se trata de la segunda novela para adultos de la
actual finalista del Premio Planeta, Cristina López Barrio.
Hoy, por fin, le llega su oportunidad. Vamos a ver qué me ha
parecido.
La trama transcurre en dos hilos temporales. Uno que da
comienzo en 1599 con la llegada de la protagonista, Bárbara de la Santa Soledad, al hospicio que le da su apellido
siendo una criatura recién nacida de apenas unas horas de vida.
El otro hilo lo situamos en 1625, siendo Berenguela (o Berenjena) de la Santa
Soledad, otra huérfana del hospicio, quien se encuentra en ese momento
testificando ante el Tribunal de la Santa Inquisición de Toledo.
La causa que se juzga es conocer la identidad real de la
joven que se hace llamar Isabel de Mendoza, la cual está acusada de haber
cometido un crimen.
Todo indica que esta joven es en realidad Bárbara, una chica
que desde niña mostró aptitudes casi mágicas con sus manos para curar enfermos.
Por ello se la conocía como la “niña santa”.
Es durante el juicio que la testigo, Berenguela, nos
mostrará la historia de la chica (y la suya propia pues las dos están ligadas)
ya que está convencida de que se trata de Bárbara y no de Isabel, tal y como la
cautiva asegura.
Además de estos dos personajes, encontramos a Diego de Montalvo y Ceniza, otro niño
recién nacido que llegó al hospicio en agosto de 1599. Los dos niños, Bárbara y
Diego, se crían juntos creando entre ellos un estrecho vínculo que será para
toda la vida.
La verdadera identidad de Bárbara, quien llega al hospicio envuelta
en un lujoso chal y con un extraño y codiciado pergamino, es el verdadero
misterio de la novela. Porque Bárbara, sin ser consciente de ello, esconde un
gran secreto…
El principio de la historia transcurre en pleno apogeo de la
epidemia de peste que asoló gran parte de la población española entre finales
del s.XVI y comienzos del XVII. Ha sido precisamente esta parte la que me ha
resultado más interesante. La autora se nota que se ha argumentado muchísimo sobre
este tema y hace unas excelentes descripciones. Como la del médico encargado de
visitar a los enfermos quien iba ataviado con una curiosa indumentaria.
O como la descripción que hace sobre la superstición
religiosa de la época y la histórica en sí.
Como ya he comentado unas líneas más arriba, me ha gustado
más la primera parte de la novela pues se centra más en el aspecto
socio-histórico de la época y en la evolución personal de los protagonistas,
Diego y Bárbara. Sin embargo, desde mi punto de vista, el ritmo lector comienza
a decaer hacia la mitad de la novela ya que se centra más en la relación
amorosa de los protagonistas y en otros aspectos que no voy a desvelar pero que
a mí personalmente no me han llamado tanto la atención.
El cielo en un infierno cabe es una novela que merece la pena
ser leída. El ritmo narrativo es ágil, sobre todo en la primera parte. Tan
rápido es que esa primera parte la he leído en un suspiro. Luego decae un poco,
pero la autora logra dar un golpe de timón en un momento dado y nos trae una
sorpresa que nos deja boquiabiertos.
Para ir terminando, El cielo en un infierno cabe es una
entretenida y adictiva novela que gusta. Una novela que combina Historia, amor,
aventuras, misterio y que mantiene pegado al lector, desde el principio, a sus
páginas.
Una novela, en definitiva, que os recomiendo.
- Imágenes tomadas de Google