Título: ¿Y si no es casualidad?
Autor: Sara
Ventas
Edición:
Diéresis, 2016
Número de páginas:
311
ISBN:
978-84-943627-3-6
Sinopsis…
Celia lleva una vida
ordenada en Madrid, que comparte desde hace cuatro años con Rubén, su novio, un
abogado guapo y trabajador, aunque poco espontáneo y nada detallista. El día
que cumple treinta años sus amigas le regalan un precioso vestido verde que
recibe junto a una noticia: tienen la dirección de Marco Ferlini, un antiguo
amigo con el que Celia mantuvo una estrecha relación con derecho a cama y a
quien perdió la pista.
Marco vive ahora en
Verona y Celia, intrigada, se decide a escribirle una carta. La respuesta que
recibe despertará todavía más su curiosidad e interés por el remitente y se
verá atrapada en una continua correspondencia.
¿Quién se esconde tras
esas cartas?
¿Podrá el destino
cruzar sus vidas de nuevo?
Sobre el autor…
Sara Ventas nació en Madrid aunque reside en Málaga. Cursó
estudios como técnico en imagen fotográfica, aunque solo se dedicó profesionalmente
durante tres años. Su interés por la escritura surgió a raíz de un blog
titulado Sueños a contraluz, en el que están registrados sus comienzos y
primeros compases como autora.
Su anterior novela, Treinta
postales de distancia, de género romántico contemporáneo, inició su
andadura como ebook en Amazon en
2012, y pronto logró una gran acogida, situándose en los primeros puestos de
ventas durante más de un año, gracias a sus lectores y seguidores en las redes
sociales.
A raíz de este éxito, los derechos en inglés de la novela
fueron adquiridos por una editorial norteamericana, Montlake Romance, que la
publicó en inglés en 2013 con el título Thirty
postcards away.
En 2015, Diëresis publicó por primera vez Treinta postales de distancia en formato
papel y en castellano. ¿Y si no es
casualidad? Es su segunda novela
Mi opinión…
La verdad es que no sé por dónde empezar esta reseña. No
quiero contaros más de lo que leéis en la sinopsis porque os chafo la historia
seguro. Y es una historia preciosa.
Celia es una chica
de treinta años que vive en Madrid con su novio, Rubén. Ella es decoradora de
interiores y él es abogado. Rubén es buen chico pero bastante soso y eso hace
que la convivencia sea monótona.
El día del cumpleaños de Celia, sus amigas Natalia y Merche
le regalan un precioso vestido verde. Regalo al que Natalia añade una dirección
postal de Verona, Italia.
Es la dirección de Marco,
un antiguo amigo de Celia con el que tuvo algo más y que un buen día
desapareció de su vida sin dejar rastro. ¿Por qué no escribirle y saber qué es
de su vida y sobre todo, por qué desapareció de la noche a la mañana?
A Celia no le parece tan mala idea y se lanza a escribirle
una carta a Marco con la idea en mente de que éste ni se va a molestar en
contestarle. Pero la sorpresa llega cuando Marco sí le contesta, comenzando una
relación epistolar que dura un año.
Y hasta aquí os cuento. Sólo os puedo decir que es una
novela fresca, que se lee casi del tirón y que encierra una bonita historia de
amor en la que el protagonista indiscutible es el destino. Yo, al igual que Celia,
creo en el destino y pienso que nada ocurre por azar o por casualidad.
Conoceremos la vida de Marco y de Celia quienes viven más de
una situación en la que es el caprichoso destino el que los pone cerca uno del
otro pero no se encuentran. He de confesar que deseaba con toda mi alma que se encontrasen,
que por fin pudiesen verse las caras porque durante un año, y a pesar de que
Marco llega a instalarse en Madrid, no se ven. Pocas veces he empatizado tanto
con los protagonistas de una novela como con ésta. Y más cuando se trata de una
novela de corte romántico. Soy bastante quisquillosa y cuando no es uno es el
otro protagonista que me parece casi una pesadilla de persona y deseo con toda
mi alma que no sigan juntos. Pero con Marco y Celia… he deseado con todas mis
fuerzas que se encontrasen.
También me ha gustado el protagonismo que cobra en la
historia la ciudad de Verona, lugar en el que Shakespeare ubicó a la pareja de
enamorados más famosos de la Historia. Imaginarme paseando por esas calles
empedradas o conociendo más sobre la famosa festividad de Santa Lucía ha sido
todo un recreo.
La historia, como he comentado, se lee casi de un tirón y es
difícil sacarse a los protagonistas de la cabeza pues son tremendas las ganas
que entran de saber si se terminan por encontrar o no y qué es lo que sentirán
al verse.
No había leído nada de Sara Ventas, aunque sí conocía de
oídas su anterior novela (Treinta
postales de distancia) pero ya os digo que voy a buscarla y leerla. Me ha
seducido su narrativa ágil y fluida.
Confieso que me gustan mucho las novelas
epistolares y aunque esta obra tiene base de ello, la mayoría de la historia se
nos muestra bajo forma narrativa.
No quiero terminar sin agradecer tanto a Laky como a Sara Ventas la oportunidad que me han proporcionado de leer esta novela. Y a
vosotros os digo que si os apetece sumergiros en una sencilla, bonita y seductora
historia de amor, no os perdáis esta obra.
- Imágenes tomadas de Google
Gracias a ti por participar y por esta preciosa reseña
ResponderEliminarYo tengo el libro pendiente y me dan ganas de leerlo ya!
Besos
Después de leer tu reseña me lo tengo que apuntar porque si te ha gustado tanto siendo novela romántica tiene que ser bueno. Además intentaré reconocer sitios de cuando estuve en Verona.
ResponderEliminarUn beso chata!
Me ha llamado la atención, parece una historia atípica.mgracias por la recomendación.
ResponderEliminarBesooos!!
Aunque no me atrae especialmente tampoco lo descarto.
ResponderEliminarTe recomiendo Treinta postales!!!
ResponderEliminarAunque me gustó más esta, pero está muy bien =)
Besotes
Que buena pinta, me gusta y esa historia para tenerte en vilo y estar buscando posibles argumentos
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